gemini

Esferas de cerámica que integran partes del cuerpo

   Obra autobiográfica, una metáfora de un concepto abstracto como es la DUALIDAD, el ser dual que todos somos y que hay en todo lo que nos rodea. Si llegamos a conocernos y a aceptarnos conforme somos, con nuestras virtudes y nuestras carencias seremos capaces de alcanzar la felicidad. 
   ¿Qué supone la naturaleza dual del ser humano? ¿Se encierra en nuestro interior una parte espiritual y otra material, una parte femenina y otra masculina, luchando por encontrar el equilibrio hasta encajar como piezas de un puzzle que forma un todo perfecto?
   Hablamos, por un lado, de una parte material, que se limita a los hechos, a lo físico, a lo palpable, una parte analítica y pragmática.
   Por otro lado, frente a esta, se halla la parte espiritual, la que siente, la que piensa, la que juzga, la que imagina y crea.
   Ambas forman un todo, una plenitud, que es la que nos define como ser humano: dos mundos aparentemente opuestos, pero que se equilibran y complementan a la perfección.
   Esa búsqueda insaciable de una armonía idealizada nos hace mejorar y avanzar como seres humanos, buscando constantemente el equilibrio entre lo racional y lo emocional para encontrar la verdad de nuestra identidad, el secreto de nuestro propio conocimiento.
   Para explicar estos pensamientos he creado un instalación basada en la constelación de Géminis.

"Ningún árbol, según dicen, puede crecer hasta el cielo a menos que sus raíces lleguen hasta el infierno". Carl Gustav Jung
 

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